SANTO DOMINGO, RD.- La jueza Ana Lee Florimon, encargada de conocer el expediente de la Operación Calamar en el Segundo Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional, ha denunciado públicamente estar siendo objeto de persecución.
Durante una audiencia realizada el viernes, la magistrada reveló que ha sido seguida en un automóvil de color blanco, extendiéndose la persecución incluso a su hijo, quien también ha notado la presencia del mencionado vehículo.
La jueza Florimon expresó su firmeza ante estas acciones, destacando que, a pesar de las adversidades, la verdad siempre saldrá a la luz.
Hizo hincapié en que las persecuciones personales son un recurso utilizado cuando no se puede atacar a nivel profesional.
«Siempre, por el principio de prudencia, por la sanidad del proceso, y para guardar derechos, que le asisten a todas las partes, no tan solo a los imputados, en este caso, son los que tienen el mayor peso, porque son los que tienen la coersión», señaló la jueza.
Ana Lee Florimon subrayó la importancia de recordar cómo se quiere ser recordado y expresó su deseo de no ser recordada por acciones arbitrarias o campañas de descrédito moral.
La jueza concluyó destacando que el poder a veces no es para todos y que las funciones judiciales no hacen a nadie inmortal ni eterno.
