Redacción.- A pesar de las victorias claras de Joe Biden y Donald Trump en las primarias de Míchigan, los resultados destacan la fragilidad electoral, con un puñado de votos que podría cambiar el rumbo en las elecciones presidenciales, situación ya vivida en 2016 y 2020.
En 2016, Hillary Clinton perdió Míchigan ante Trump por tan solo 10,704 votos, mientras que en 2020, Trump perdió ante Biden por una diferencia de 154,188 votos.
Ahora, con el 99% del escrutinio realizado, el voto de protesta contra Biden por su postura en el conflicto de Gaza ha alcanzado más de 101,000 votos, alrededor del 13% de las papeletas emitidas.
Aunque Biden obtuvo el 81.1% de los votos, los 101,000 demócratas que expresaron descontento pueden ser cruciales en las elecciones de noviembre.
Lo mismo se observa en la primaria republicana, donde más de 300,000 votos indican un rechazo a Trump.
Analistas advierten que estos resultados no cuestionan la nominación de Biden o Trump, pero resaltan la importancia de tomar en serio la oposición a sus candidaturas.
El supermartes del 5 de marzo será crucial para determinar si esta brecha es un problema local o nacional.
