Un grupo de agentes SWAT del Departamento del Sheriff del Condado de Orange, en el sur California, fue sorprendido por una explosión el miércoles, dejando a 16 de ellos hospitalizados, uno de ellos con una cirugía de urgencia ante una lesión profunda en la pierna
El sargento Frank González, portavoz del departamento, informó que la explosión, que se produjo en una instalación de entrenamiento en Irvine, se reportó poco antes de la 1:00 p.m. durante una sesión con el escuadrón antiexplosivo. Pese a que la se siguen investigando las causas del accidente, las primeras hipótesis no descartan que se haya tratado de un accidente en el manejo de un material pirotécnico.
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Otras dos personas sufrieron heridas fuertes, pero no requerirán una intervención quirúrgica. Entretanto, los otros 13 agentes SWAT están siendo tratados por síntomas de mareos y zumbidos en los oídos, que son comunes en incidentes relacionados con explosiones.
Según las imágenes aéreas capturadas por medios locales, se mostró el área acordonada, con un edificio de una planta en el centro de la escena, y que está rodeado de campos extensos.
Entretanto, la portavoz del FBI, Laura Eimiller, destacó que ningún miembro del personal de la agencia resultó herido. El Centro de Entrenamiento Táctico Regional del Agente Especial del FBI Jerry Crowe, ubicado al sur de Los Ángeles, es conocido por facilitar entrenamientos en armas de fuego y pruebas de calificación tanto para la oficina como para agencias policiales locales.
Ante esto, el FBI ha asumido la dirección de la investigación con el fin de esclarecer las circunstancias que llevaron a este lamentable suceso.
“Un incidente de entrenamiento que ocurrió hoy en las instalaciones de entrenamiento del FBI en Irvine con socios encargados de hacer cumplir la ley resultó en algunas lesiones y está bajo investigación”, señaló la agencia en un comunicado.