La Paz.- Una turba sacó de una celda policial y mató a golpes este miércoles a tres hombres acusados de un supuesto secuestro en una localidad rural de la región de Cochabamba, en el centro de Bolivia.
El suceso ocurrió en la localidad de Ivirgarzama, en la zona del Trópico de Cochabamba, donde los hombres se encontraban arrestados «por un tema investigativo», según dijo a los medios la delegada de la Defensoría del Pueblo en Cochabamba, Marioly Álvarez.
«El reporte preliminar que se tiene (…) es que estas tres personas han perdido la vida. Queremos manifestar que la Defensoría del Pueblo rechaza cualquier situación de violencia», sostuvo Álvarez.
En las redes sociales circulan videos que muestran cómo decenas de personas enfurecidas entran a la oficina policial para sacar de allí a los hombres a patadas y golpes.
Luego se ve a los hombres ensangrentados, atados de manos, con el torso descubierto y obligados a ir de rodillas por las calles del pueblo.
Los pobladores justificaban sus acciones porque en un vehículo que pertenecía a los hombres encontraron una mochila escolar, y les acusaron de ser responsables de una ola de secuestros en Ivirgarzama.
En otro video se ve que el vehículo fue incendiado por la turba.
El subcomandante de la Policía de Cochabamba, Jaime España, explicó por su parte que uno de los fallecidos tenía antecedentes por robo agravado en la región oriental de Santa Cruz y que se investiga si los otros tenían prontuario.
También se indaga si los hombres realmente tenían «relación con estos hechos que se han venido suscitando referentes a secuestros», señaló España.
Según el jefe policial, eran cuatro las personas investigadas, pero uno de ellos huyó cuando fueron detenidos.
Álvarez lamentó que la investigación por los presuntos delitos cometidos por los hombres «se ha visto afectada con este accionar violento y ahora se tiene a tres personas que han perdido la vida», lo que también debe ser indagado.
La representante indicó que la Defensoría intentó hacer gestiones con las autoridades locales y dirigentes «para que se pueda intervenir y mediar con este grupo de ciudadanos que reclamaban justicia por mano propia, pero penosamente, esta situación no se ha podido efectivizar».