Caracas, (Prensa Latina) El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, informó hoy de la detención de los empresarios Aldo Roso Vargas y Ricardo Albacete Vidal, por presuntos delitos de comercio ilícito de materiales estratégicos.
En rueda de prensa desde la sede del Ministerio Público, Saab ofreció detalles sobre estos dos ciudadanos aprehendidos el pasado mes en Caracas y de sus vínculos con sectores de la extrema derecha colombiana, entre los que mencionó a los expresidentes Álvaro Uribe (2002-2010) e Iván Duque (2018-2022).
Precisó que durante las investigaciones de los organismos e inteligencia se determinó que los ahora acusados recibieron financiamiento desde el exterior para cometer acciones vinculadas con la extrema derecha neonazi y ejecutar movimientos desestabilizadores.
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El titular de la Fiscalía venezolana explicó que las pesquisas revelaron que ambos tenían como centro de sus operaciones los estados de Mérida y de Táchira, en el occidente del país, y este último fronterizo con Colombia, además de la ciudad de Caracas.
Sus actos dirigidos contra el sistema eléctrico nacional pretendían, subrayó, generar zozobra y malestar entre la ciudadanía y utilizarlo como rédito político con el objetivo de «desestabilizar las elecciones presidenciales del próximo 28 de julio».
Saab puntualizó que Vargas y Albacete fueron imputados por el fiscal del caso por la presunta comisión de los delitos de tráfico y comercio ilícito de recursos, materiales estratégicos y asociación para delinquir, y se emitieron órdenes de allanamiento de lugares en Mérida, Táchira y Caracas.
Al referirse al material eléctrico sustraído, del cual mostró un audiovisual, indicó que pudo verificarse que contaban en su poder con «con gran cantidad de material estratégico», perteneciente a la Corporación Eléctrica Nacional (Corpolec), y cual se valoró en 150 mil dólares.
Entre los materiales encontrados en unos galpones de la empresa Gurimetal, en el estado de Táchira, había unos 20 transformadores eléctricos, 500 kilogramos de guaya (cables) de alta tensión, 50 pararrayos eléctricos, 250 lingotes de aluminio, todos pertenecientes a Corpolec.
Puntualizó que dicha empresa operaba de manera ilícita desde el 2020 y a través de las investigaciones y denuncias de los obreros se corroboró que allí se realizaban labores de fundición con material extraído del sistema eléctrico nacional, los cuales eran utilizados en función de la entidad.
El titular del Ministerio Público reflexionó que el que pretenda actuar en detrimento del Estado con estas acciones serán procesados acorde a la ley, porque el pueblo merece vivir en paz y tranquilidad.