Una paciente al parecer murió al caerse por las escaleras en un centro de salud familiar en El Bronx (NYC), pero su cuerpo no fue hallado sino cinco días después cuando alguien notó un “mal olor”, dijo la policía de Nueva York.

Sary Mao, refugiada política de 57 años, fue encontrada acostada boca abajo en una escalera de emergencia en el “Montefiore Family Health Center” en 1 Fordham Plaza el lunes, informó News12.

La inmigrante nativa de Camboya era un paciente de larga data en ese centro de salud. Al parecer murió el miércoles de la semana pasada después de acudir a la clínica para una cita, según una investigación policial inicial.

La causa oficial de la muerte fue una enfermedad cardiovascular hipertensiva, según el médico forense de la ciudad. No está claro si eso provocó que se cayese por las escaleras, acotó New York Post.

“El informe médico indicó que tuvo un ataque cardíaco, el problema para mí es que si se hubieran hecho patrullas regulares, habrían encontrado su cuerpo antes”, criticó Vázquez Rhem.

La víctima había estado viviendo en el hogar grupal “Beacon of Hope” en El Bronx. Un empleado del centro de salud le dijo a Politico que la escalera donde se descubrió el cuerpo de Mao estaba marcada con un letrero de “Salida de emergencia” sólo en inglés, a pesar de que la clínica atendía a muchos pacientes con dominio limitado de ese idioma.

“Tenemos muchas preguntas sobre cómo ocurrió su muerte“, dijo en un comunicado Mekong NYC, un grupo de defensa de la comunidad del sudeste asiático en El Bronx. “Exigimos respuestas y transparencia por parte de Montefiore, y responsabilizaremos al Hospital para que nuestras comunidades estén seguras (y no corran más peligro) cuando estén bajo el cuidado de Montefiore”.

El centro de salud, que recibe fondos federales para atender a comunidades desfavorecidas, declinó comentar sobre la muerte de Mao debido a “la HIPAA (Health Insurance Portability and Accountability Act) y las reglas de privacidad del paciente”.

En un caso similar, en agosto del año pasado una familia presentó una demanda alegando que una anciana de 86 años había muerto en un centro de rehabilitación del Upper East Side de Manhattan y luego dejaron descomponer su cuerpo porque no lo entregaron a tiempo a la funeraria.

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